Hola amigos.
Este post es continuación del ENMENDANDO ERRRORES... del pasado 9 de febrero, en el que contaba alguno de los errrores que cometía ( y que todavía cometo), en los inicios de mi afición. En aquella entrada me centré en unas sabinas canarias que habían sido cultivadas desde el inicio en unas macetas diminutas y con un substrato totalmente inadecuado, lo cual había ralentizado el crecimiento de los árboles por lo que tuve que empezar de cero con ellas.
Pues bien, hoy le toca el turno a los acebuches. En este caso, cuatro acebuches ( me quedan otros diez), que fueron cultivados de idéntica forma que las sabinas, esto es las mismas macetas y el mismo substrato equivocado.
Tengo que pedir disculpas porque en
estas fotografías no se aprecia bien el verdadero tamaño de las nuevas
macetas, que es mucho mayor que las anteriores. Me apunto como tarea
pendiente para futuros posts, el poner una referencia para tener una idea del auténtico tamaño.
Aprovechando que tocaba transplante, intenté corregir el error, para darles una nueva oportunidad a los arbolitos. Tengo que aclarar que estos acebuches corresponden a mis principios con el bonsai, por lo que son acebuches que han sido cultivados con mucho cariño y mucha dedicación, pero de forma eqjuivocada, por lo que en este caso, lo que hago es una huída hacia adelante, esto es, potenciar la idea inicial que tenía para los árboles, pero cambiando a una maceta mayor y substituyendo el substrato por uno más adecuado, en su mayor parte, picón.
Tengo que decir que todos estos acebuches proceden de esquejes y hace un año eran plantones de apenas 15 cmts de altura. Al principio, me conformaba con mantenerlos vivos, no tenía ni idea de lo que era un nebari, ni un ápice ni sabía alambrar, por lo que me limitaba a elegir los esquejes en función de la forma, esto es, si el árbol me decía "algo" y lo "ayudaba" mediante poda de ramas, nunca alambrando. Todo un experto, vamos...
Pues bien, Vamos con el primero...
Si nos fijamos bien, las raíces estaban en el aire, por lo que no tenía estabilidad ninguna, así que opté por apoyarlo en una piedra volcánica, que cumple una misión más decorativa que de estabilidad, aunque no descarto que el tronco acabe incrustándose en una oquedad de la piedra.
Sigue quedando una raíz en el aire, pero no me atreví a cortarla, quizá en un próximo transplante...
Ahora el segundo...
También tenía las raíces en el aire por lo que intenté enraizarlo sobre una roca, cosa que conseguí parcialmente. No se aprecia bien, pero la raíz de la derecha rodea la piedra y cambia la trayectoria al enterrarse, por lo que confío en que enraice bien.
Yo no suelo ponerle nombre a mis arbolitos, pero mi hija me dijo desde el principio que éste parecía cansado y que se habí apoyado en una piedra, por lo que lo llamé al acebuche cansado...
El tercero...
También con las raíces en el aire, por lo que una vez más, opté por el enraizado sobre piedra. Creo que quedó aceptable...
Visto de cerca...
Y ya por último, el cuarto acebuche...
Tengo que reconocer que es el que más me gusta, quizá por que se intuye que podría ser un Fukinagashi en el futuro...
Como habrán podido apreciar, en un año ninguno ha crecido ni engordado, por lo que prácticamente parten de cero, en unas macetas de mayor tamaño y con otro substrato. Como dije en el anterior post, un año perdido par los árboles que ahora es cuando comiezan su verdadero camino.
He aprendido la lección y asumo estos errores como parte fundamental del proceso de aprendizaje en el cultivo de bonsais. Ahora paciencia, tranquilidad y buenos alimentos...
Saludos
Uno de los secretos del bonsái, justamente con lo que terminas la entrada, paciencia, tranquilidad y buenos alimentos. Con paciencia irán creciendo los esquejes y engordando y tendrás la satisfacción de haberlos creado desde el principio.
ResponderEliminarUn consejo para las raíces en la roca. Mejor tapar con el sustrato roca y raíces, atando estas últimas con cuerda, cinta, tela... para que se unan perfectamente a la roca. En todo caso, tal y como están yo las ataría con una cinta de tela apretándolas contra la roca para intentar que la agarren, o aunque engorden se irán separando de ella.
Ánimo, que vas a disfrutar mucho con estos esquejes.
Un abrazo. César.
Muchas gracias, César, una vez más. Ahora mismo pongo en práctica tus consejos. Iré contando el resultado.
EliminarUn abrazo.
Lo importante es tener claro el camino y paciencia, el amigo buxus lleva razón. Seguiré tus trabajos. Un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias, Keisha. Mi mayor error fué empezar sin formarme, sin saber que hacer. Al menos eso he aprendido. Ahora paciencia. Es un placer saber que gente de tu nivel me sigue.
EliminarUn abrazo
Hola Ishi, habrás leído muchas veces que avanzamos a la par que nuestros árboles, tu ya has dado un paso adelante, ahora lo darán esos árboles sin duda.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias, amigo Púnica. Efectivamente he dado un paso adelante, espero que los árboles progresen y recuperen el tiempo perdido.
EliminarUn abrazo
Hola Antonio, me gusta mucho el último y es cierto que con mucho tiempo y mimo sera un Fukinagashi interesante. No pierdas de vista al que llamais el "Acebuche Cansado", lo veo muy interesante tanto si decides en un futuro que la copa sobrepase la roca o que al contrario, la copa se oponga a la roca.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Fran. A mí también me parecen los más interesantes, sobretodo el Fukinagashi. Necesita tiempo, paciencia y mucho mimo, como bien dices. Lo del acebuche cansado no lo tenía claro pero al leer tu comentario creo que intentaré que la copa se oponga a la roca. Muchas gracias por tu intervención.
EliminarUn abrazo.
Menuda colección de acebuches. Con ellos irás aprendiendo el cultivo de la especie para el día que venga un ejemplar de más entidad.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Carlos. Si que tengo unos cuantos, todos pequeñitos, pero me sirven para practicar. De momento sólo los he podado y alimentado, pero aprendo de ellos. A ver si un día me llega uno mejor, como díces.
EliminarUn abrazo.
Con paciencia seguro que logras tus propositos. Ganas ya le pones.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias, Loli. Mi problema es que no sabía qué hacer ni cómo hacerlo, ni tampoco es que tenga mucha paciencia, pero ahora sé cuál es el camino.
Eliminarun abrazo
Hola Ishi, estoy con todo lo que han dicho los compañeros.
ResponderEliminarLos arboles te dicen si lo estás haciendo bien o mal, muchas veces es probar acierto/error, pero yo creo que lo mas importante, es ser crítico con uno mismo y aprender de los errores.
un saludo y ánimo
Muchas gracias, Roberto. Yo también creo que los árboles te hablan y estoy aprendiendo a escucharlos. De momento lo he hecho todo mal, aunque creo saber enderezar el rumbo y he aprendido lo que no debo hacer.
EliminarUn abrazo
Un año perdido por los árboles, pero un año de experiencia que has ganado. No se es mas viejo, se es mas sabio. Sigue así, pues vas por el buen camino.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Martín. Efectivamente, los árboles han perdido un año pero para mí ha sido un tiempo fantástico. Tiempo de aprendizaje y de ilusión. Me queda muuucho. Muchos de estos acebuches (y los que no he mostrado ) están inspirados en tus magníficos trabajos, veremos en que quedan.
Eliminarun abrazo
Hola Ishi,
ResponderEliminarTodos en nuestros inicios hemos hecho experimentos con diversos sustratos.
Me alegro que hayas dado con el sustrato adecuado, o por lo menos, que vayas descartando sustratos que no son apropiados.
Un abrazo.
Muchas gracias, Carlos. Hace unos meses hice una prueba y puse dos acebuches en picón y como el resultado ha sido bueno he decidido generalizarlo, al menos a los acebuches. De momento funciona. Otra cosa que he aprendido.
ResponderEliminarUn abrazo
Me encanta esta forma de comenzar y esta forma como narras estos comienzos. Tienes un potencial dentro, para este arte, que irá aflorando en cada trabajo y el progreso ha de ser enorme. Estoy seguro.
ResponderEliminarMuy bonitos esos adosados a roca. Aunque el acebuche tiene un crecimiento lento, con el tiempo les quedará muy pequeña la piedra. Comprendo que la pusiste de este tamaño, buscando una cierta armonía estética del conjunto. En una piedra grande el árbolin hubiese parecido poco acorde, pero ya sabes que esto lo iría solucionando el tiempo.
Tienes el blog desde hace poco tiempo, no?
Un abrazo.
Muchas gracias, Yoyo. Es un placer para mí que leas mi blog y que participes en él. No sé si tengo potencial, pero lo que si tengo es ilusión, curiosidad y ganas de mejorar. Creo que ha llegado el momento en que sé lo que tengo que hacer pero no sé como hacerlo. Esa es la siguiente tarea.
EliminarEfectivamente, al no ser muy mañoso con las manos, he optado por la estética antes que la efectividad. Lo sensato habría sido poner piedras mayores. Como bien dices, el árbol irá diciendo.
Tengo el blog desde octubre y empecé con esto hace aproximadamente un año. Espero mejorar, pues me queda muuucho camino por delante. Aunque con la ayuda de maestros como uds, se me hace más fácil. Muchas gracias por participar en mi blog. Es un orgullo.
Un abrazo
Lo importante es que los olivos están vivos jajaja, un año de crecimiento no es nada, eso sí, transmíteles a tus hijas los cuidados de los acebuches porque viven más de mil años, son una de las especies más longevas, así que no descartes que vayan a ser buenos ejemplares algún día jaja. Venga, un abrazo, hasta luego.
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